Una empresa china desarrolló un robot facial hiperrealista capaz de imitar expresiones humanas

Parpadea, eleva la mirada, mira hacia ambos lados, asiente e incluso mueve los labios. Todo eso puede lograr una cabeza robótica desarrollada por una empresa china. Si bien solo está sobre un escritorio conectada a unos cables, sorprende por su diseño hiperrealista.
Desarrollado por AheadForm, empresa cuyo enfoque es crear robots humanoides que “puedan integrarse perfectamente en la vida diaria”, el Origin M1 es un robot facial “diseñado para investigación, interacción y escenarios de visualización de alta gama”.
De acuerdo con la descripción del video, publicado en su canal de YouTube, la cabeza cuenta con un sistema de “accionamiento facial completo” con hasta 25 micromotores que le permiten realizar expresiones realistas, parpadeos y movimientos oculares.
Además, incluye cámaras RGB integradas en las pupilas que le proporcionan percepción visual, mientras que los micrófonos y altavoces incorporados admiten la interacción de audio en tiempo real.
“Compacto, pero potente, el módulo de cabeza se puede montar en varias bases o integrarse en sistemas robóticos más grandes”, indicaron. Dado que el objetivo de AheadForm es integrar algoritmos avanzados de inteligencia artificial (IA) a sus robots, el Origin M1 se presentó como “una plataforma ideal para estudios de IA basados en las emociones, investigación sobre la interacción entre humanos y robots e instalaciones basadas en personajes”.
“En esta era de desarrollo vertiginoso de Internet, nos hemos enamorado de muchos personajes, pero a menudo solo podemos mirarlos a través de la pantalla. El Plan Origin romperá esos límites, permitiendo que ellos poco a poco entren en la realidad“, aseguró la empresa en el video.
Así, además del Origin M1, la empresa desarrolló la serie Elf, robots humanoides ultrarealistas que cuentan con hasta 30 músculos artificiales bajo su piel realista, lo que les permite realizar movimientos fluidos y naturales que imitan la elegancia humana y élfica.
Impulsados por un sistema de control preciso y un algoritmo avanzado de aprendizaje de IA, el Elf V1 es capaz de percibir el mundo, comunicarse, aprender e interactuar de manera inteligente con su entorno.
Yuhang Hu, un estudiante de doctorado en la Universidad de Columbia, en Nueva York, Estados Unidos, donde se especializa en Machine Learning (robótica y aprendizaje automático), fundó la empresa con el objetivo de que los robots se conviertan en máquinas de aprendizaje de por vida a través de la autosupervisión.
Según explica en su página web, esta visión busca que los robots puedan adaptarse rápidamente a nuevos entornos, transferir habilidades entre diferentes plataformas robóticas y adquirir continuamente nuevas habilidades, tal como lo hacen los humanos.
Hu forma parte del laboratorio de máquinas creativas de la Universidad de Columbia, donde es asesorado por el profesor Hod Lipson, un ingeniero en robótica israelí-estadounidense que dirige el área de investigación.
Hu participó en varios proyectos relacionados con el auto-modelado y el control robótico. Desarrolló robots faciales capaces de producir expresiones dinámicas similares a las humanas utilizando modelado de piel blanda –soft-skin modeling– y aprendizaje autosupervisado.
Además, fue coautor de un trabajo que involucra al robot facial antropomórfico llamado Emo, que está equipado con 26 motores y piel de silicona flexible. Emo fue entrenado para mostrar una expresión anticipatoria y podía predecir una sonrisa humana 839 milisegundos antes de que el humano sonriera, ajustando su rostro para sonreír simultáneamente.
También trabajó en Eva 2.0, un robot físico de rostro humanoide con piel suave, utilizando un marco de aprendizaje autosupervisado basado en visión para la mímica facial (ICRA 2021).
Fuente: www.clarin.com